Después de que se le hizo el remake de la primera versión de Wes Craven, donde inolvidable Freddy Krueger, el mismo asesino onírico que Jackie Earle Haley interpretó después de reemplazar al veterano Robert Englund, generó algo de decepción en la audiencia, a pesar de esperar algo más de lo imaginado, y de que un grupo de casi 250 personas se quemaron su tiempo para realizar la producción, bajo la dirección de Samuel Bayer, que supervisaba videos de Green Day, U2, entre otras bandas, como si dijeran “hombre, mejor dedíquese a trabajar con músicos”, después que le apunten al talentoso Michael Bay, el mismo que se ganó su porrón de créditos con Transformers.
Michael Bay, desde el 2003, otro año de películas prometedoras (como todos, XD), se dedica desde ese entonces a desempolvar iconos de todo lo relacionado al horror, asi como el caso del clon de Michael Myers, el mismísimo Thomas Hewitt, alias “Leatherface”, el que inició la “Texas Chainsaw Massacre”. Sin embargo, la audiencia que olvida las versiones originales por ponerse a ver tales remakes, que en algunos de estos se ve una falencia, como en otras películas (nada que ver con mas remakes), que el titulo llama mucho la atención, pero el reparto no resulta ser tan convincente, y esto nos daría la idea que es montar proyectos con por así decirlo, un bajo presupuesto, con lo que por salvar la patria, meten a uno que otro actor de reconocimiento.
Lo que genera muy pocos resultados es que los productores en algunas películas que serían realmente tanto prometedoras como tentadoras, es que se deja en manos de directores “inexpertos”, en el caso de uno especializado en videos musicales como se dijo anteriormente, en lo que luego llegaría a las salas de cine, y la audiencia comente cosas como:
• “yo quería esperar algo más que este “hueso” de película”
• “es una verdadera “chanda” de película, la verdad yo me conformo con la original”
• “sinceramente... no me gustó para nada”
• “los efectos especiales son buenísimos, pero de resto... no sabría como decir”
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