El magnate regente de la casa del
Tío Sam, el señor Donald Trump, querido por unos, detestado por la mayoría del
mundo, un hombre que ha expresado su preocupación por el rumbo de los
videojuegos hacia la audiencia, que además de su contenido sexual, las
atribuciones a los muy diseñados modelos femeninos con trajes tan ajustados
como los calzoncillos que el mismo presidente norteamericano para evitar que le
de ‘churrias’ excesivas, además de ver su rechazo hacia la mayoría de culturas
del mundo. Esta preocupación no siempre se limita al contenido sexual, sino que
la violencia audiovisual es muy evidente en los últimos juegos, que según el mandatario,
planea promulgar una ley que erradicaría juegos de esta índole, algunos títulos
como Street Fighter V, la saga de Call Of Duty, Killing Floor, GTA, entre otros,
y lo define como terrorismo audiovisual, hablando de comercializar armas y
entrenar gente a promover la violencia.
Ademas de los videojuegos, Trump
quiere un ataque publicitario erradicando algunos proyectos para cine y televisión.
Lucasfilm Disney tendrán un plan de contingencia para contraatacar la cruda intención
del mandatario. Y sí, lo veriamos en lado del lenguaje fuerte que ya se aplica
en las películas, que ya dejaron de ser comedia, que en nuestro país, las
famosas narconovelas, los actores mas famosos ya sueltan el ‘malparido y triple
hijueputa’ madrazo deliberadamente, o en juegos como GTA y parecidos mantienen
diciendo ‘Fuck You’ por montones, además que hay juegos con escenas violentas y
sexuales explicitas, sin excepciones que en Japón, que remotamente, en la época
de Windows 95 / 98, se crearon juegos eróticos y con contenido ‘Hentai’, lo mas
polémico para el otro lado del mundo, la casa de los occidentales, superando la
fantasía de las muñecas inflables.
¿Qué tal si ponemos algunos
personajes que realmente le causen diarrea al presidente de los Estados Unidos,
en cuanto a su percepción a la violencia? De haberlos, hay que sacar lista y
papel y lápiz para definir cuáles son los adecuados, además de hacer un juego más
interesante, pensando que los antagonistas ganan mas popularidad que los
protagonistas, y hablando de antihéroes que les gusta salvar el mundo por su
propia cuenta. Trump como tal es el villano que tendría la ambición
descabellada de M Bison, la tiranía de Shao Kahn y el deseo de poder de Albert
Wesker. No hay una clase de superhéroe que rescate el universo de los
videojuegos, no hay un Mario Bros, ni un Sonic ‘The Hedgehog’, ni mucho menos
un Kyo Kusanagi que le ponga los puntos en las íes al señor Trump. Sin embargo,
le podemos apostar que esa ley, nadie, ni a palo, le hagan aprobar esa dichosa
ley contra los videojuegos, la violencia nunca pararía para esta industria.
¿Existiría la posibilidad que
alguien diseñe a Donald Trump como jefe final para un videojuego? Incluso en
Dragon Ball Toriyama pudo incluir a Hitler en una película, y observando un
clon suyo, el General Morden de Metal Slug sea el candidato perfecto para
representar al monstruo deidad de los republicanos. Esta situación demuestra
que los videojuegos están en guerra con Donald Trump, además que las compañías temen
por cobrar un impuesto adicional a sus juegos para sus clientes. Por ende, ya
existen campañas que están defendiendo los derechos por los juegos. Japón y Estados
Unidos se unen a la causa, ambos países que son pioneros saben cómo hacer
parodias de políticos amargados asi como Martin De Francisco y Santiago Moure
en La Tele.
La ‘Trump-ada’
De Nintendo, Trumptendo Ataca
Un artista visual, como Jeff Hong,
trabajando para Disney por un periodo de mas de 15 años, se le ocurrio la
disparatada idea de asociar a Trump como el villano de Nintendo, modificando
algunos juegos que marcaron la compañía, en cuanto a su consola NES, creando el
proyecto ‘Trumptendo’. La nostalgia de los 8 Bits, es la razón para crear unas
parodias como ‘Donkey Trump’ y ‘Super Bernie Bros’, el primero Trump hace de DK
y el segundo, Bernie Sanders, el candidato demócrata se transforma en Mario, enfrentándose
al magnate, cortando el puente para tumbarlo a la lava para rescatar a la
princesa de su secuestrador republicano.
Para Jeff Hong, Donkey Kong y
Bowser han sido los villanos ideales para la personalidad de Donald Trump,
debido a su sed de poder y dominación de todo el mundo, y siendo estos los
personajes antagónicos por tener ciertos rasgos en su carácter políticamente tirano.
Los 8bits se convirtieron en el arma de repulsión al republicano para crear
conciencia a la sociedad en la perspectiva pacifica de los videojuegos. ¿Cuál paz?
Hasta en los 8 Bits también se manifiesta el indicio de la violencia, una fábrica
virtual de monstruos. Por ende, Hong, publico unos dibujos gore de Disney, una
especie de princesas zombies, pero su proyecto Trumptendo fue lo atractivo para
la comunidad gamer, sintiendo ganas de colgar a Trump, sabiendo cosas de política
aun.
Los
Juegos Nos Han Salido Caros, Y Culpemos A Santos…
Desde su posesión como presidente,
Trump, como se comentó previamente, expuso que los juegos que hoy en día ya no
suelen entretener a niños, adolescentes, ni adultos, sino que ya su propósito es
satanizar a todas las edades por su manera de manifestar ese foco exagerado de
sexo y violencia, como una biblia negra virtual, además de la tecnología como
tal. Y si nos fijamos en la devastada situación económica que no solo se siente
en nuestro país, sino también a nivel global, los niveles de desempleo en las
grandes ciudades se hace sentir, y aún se ve el impacto que se siente en la
mercadotecnia de videojuegos, bajo el 19% de IVA, aprobado por Juan Manuel
Santos.
El plan maestro de Trump es
colocar impuesto a todo producto importado, hasta lo que es fabricado de
procedencia norteamericana alrededor del mundo, lo que agobia el bolsillo del
consumidor. En el sector de los videojuegos se vio tan afectado, ya que la mayoría
de compañías son fuera de Estados Unidos, incluso la producción de consolas son
ensambladas comúnmente en China, la zona de exportación a grandes masas. La ESA
(Entertainment Software Association) ha elaborado un plan de contingencia para tumbar
la ley de Trump de incrementar los precios de la mercadotecnia gamer, oliendo
algo terrible sobre el proyecto en la Casa Blanca. El impacto del dólar no es
el síntoma de lo caro que resultaría ser una consola NextGen como la PS4, la
XBOX One, la WiiU (ya ni pega), y ahora la Nintendo Switch, que ya valen un ojo
de la cara, que hasta los ricos se quejan, y se siente la proliferación de más
niños rata, no solo en los videojuegos, además de ver los pesados precios en la
canasta familiar, la educación y la salud (aquí en Colombia, ni nos rebajan el Acetaminofén).
Pues esta es la triste realidad que se dio a la luz desde
hace tres meses, y hay poca luz para regular el ritmo en la economía, no vemos
mas progreso en la industria de los videojuegos, por ver solo refritos, o crear
títulos que ya no llaman la atención. Por tal punto, los que pertenecemos a la
vieja guardia, nos volveríamos a encerrar en los inolvidables universos de los
8 y 16 bits.
